24. Oraciones del cristiano


La Señal de la Cruz
Por la señal de la santa cruz de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios nuestro
En el nombre del Padre
y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.


Padre Nuestro

Padre nuestro,
que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.


Ave María
Dios te salve María
llena eres de gracia
el Señor es contigo;
bendita tú eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto
de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la ahora de nuestra muerte.
Amén


Gloria
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio,
ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén


Credo de Nicea-Constantinopla

Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra,
de todo lo visible y lo invisible.

Creo en un solo Señor, Jesucristo,
Hijo Unico de Dios,
nacido del Padre, antes de todos los siglos:
Dios de Dios, Luz de Luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado,
de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho;
que por nosotros, los hombres,
y por nuestra salvación, bajó del cielo,

y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, La Virgen,
y se hizo hombre;

y por nuestra causa fue crucificado
en tiempos de Poncio Pilato;
padeció y fue sepultado,
y resucitó al tercer día, según las Escrituras,
y subió al cielo,
y está sentado a la derecha del Padre;
y de nuevo vendrá con gloria
para juzgar a vivos y muertos,
y su reino no tendrá fin.

Creo en el Espíritu Santo,
Señor y dador de vida,
que procede del Padre y del Hijo,
que con el Padre y el Hijo
recibe una misma adoración y gloria,
y que habló por los profetas.

Creo en la Iglesia,
que es Una, Santa, Católica y Apostólica.

Confieso que hay un solo Bautismo
para el perdón de los pecados.

Espero la resurrección de los muertos
y la vida del mundo futuro. Amén.


Credo de los Apóstoles

Creo en Dios, Padre todopoderoso,
creador del cielo y de la tierra.

Creo en Jesucristo,
su único Hijo, Nuestro Señor,

que fue concebido
por obra y gracia del Espíritu Santo.
Nació de Santa María Virgen,

padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó de entre los muertos,
subió a los cielos
y está sentado a la derecha de Dios,
Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir a juzgar
a vivos y a muertos.

Creo en el Espíritu Santo,

la Santa Iglesia Católica,
la Comunión de los Santos,

el perdón de los pecados,

la resurrección de la carne,
y la vida eterna. Amén.
ro la resurrección de los muertos

y la vida del mundo futuro. Amén.


Salve
Dios te salve, Reina y Madre de misericordia,
vida, dulzura y esperanza nuestra.
Dios te salve.
A Tí clamamos los desterrados hijos de Eva,
a Tí suspiramos,
gimiendo y llorando en este valle de lágrimas.
Ea, pues, Señora Abogada Nuestra,
vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos,
y después de este destierro, muéstranos a Jesús,
fruto bendito de tu vientre.
Oh, clementísima, oh piadosa, oh dulce Virgen María.

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios,
para que seamos dignos de alcanzar las promesas
de Nuestro Señor Jesucristo.

Al  Angel de la Guarda
Angel de la Guarda, que eres mi custodio,
ya que el Señor me ha encomendado a tí,
ilumíname, guárdame, rígeme y gobiérname.
Amén


Bajo tu amparo
Bajo tu amparo nos acogemos,
Santa Madre de Dios.
No desprecies las súplicas
que te dirigimos en nuestras necesidades.
Antes bien, líbranos de todos los peligros,
oh, Madre Gloriosa y Bendita.

Acordaos
Acordaos, oh piadosísima Virgen María,
que jamás se oyó decir
que ninguno
de cuantos han acudido a vuestra protección
e implorado vuestro auxilio,
hayan sido abandonados por  vos.
Animado por esta confianza,
a vos también acudo, oh, Virgen de las vírgenes
y gimiendo bajo el peso de mis pecados,
me atrevo a comparecer
ante vuestra soberana presencia.
No desechéis nuestras súplicas,
oh Madre del Verbo Divino.
Antes bien, escuchadlas y acogedlas benignamente.
Amen.

Consagración a la Virgen (I)
Bendita sea tu pureza
y eternamente lo sea.
pues todo un Dios se recrea
en tan graciosa belleza.
A Tí celestial princesa,
Virgen Sagrada María,
yo te ofrezco en este día
alma, vida y corazón.
Mírame con compasión,
no me dejes, Madre mía.

Consagración a la Virgen (II)
Oh, Señora mía, Oh, Madre mía.
Yo me ofrezco todo a vos.
Y en prueba de mi filial afecto,
os consagro en este día
mis ojos, mis oídos, mi lengua y mi corazón.
En una palabra: todo mis ser.
Ya que soy todo vuestro, oh, Madre de bondad,
guardadme y defendedme
como cosa y poseción vuestra. Amén.

Consagración A La Virgen (III)
De Juan Pablo II
Virgen Madre de Dios, haz que yo sea todo tuyo.
Tuyo en la vida, tuyo en la muerte,
tuyo en el sufrimiento, en el miedo, en la miseria,
tuyo en la cruz y el doloroso consuelo,
tuyo en el tiempo y en la eternidad.
Virgen Madre de Dios,
haz que yo sea todo tuyo. Amen.

Yo Confieso
Yo confieso ante Dios Todopoderoso,
y ante ustedes hermanos
que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión.
Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa.
Por eso ruego a Santa María siempre Virgen,
a los ángeles, a los santos
y a ustedes hermanos,
que intercedan por mí ante Dios Nuestro Señor. Amen

Pésame
Pésame Dios mío,
y me arrepiento de todo corazón
de haberos ofendido.
Pésame por el infierno que merecí
y por el cielo que perdí.
Pero mucho más me pesa, porque pecando ofendí
a un Dios tan grande y tan bueno como Vos.
Antes querría haber muerto que haberos ofendido.
Y propongo firmemente no pecar más
y evitar las ocasiones próximas de pecado. Amén.

Alma de Cristo
Alma de Cristo, santifícame.
Cuerpo de Cristo, sálvame
Sangre de Cristo, embriágame.
Agua del costado de Cristo, lávame.
Pasión de Cristo, confórtame.
Oh, Buen Jesús, óyeme.
Dentro de tus llagas, escóndeme.
No permitas que me aparte de Tí.
Del maligno enemigo defiéndeme.
Y a la hora de mi muerte, llámame,
y mándame ir a Tí,
para que con tus santos te alabe,
por los siglos de los siglos. Amén.

Oración de San Francisco de Asís
Señor, haz de mí un instrumento de tu paz:
Donde haya odio, ponga yo amor;
Donde haya ofensa, ponga perdón;
donde haya discordia, ponga armonía;
donde haya error, ponga  verdad;
donde haya duda, ponga  la Fe;
donde haya desesperación, ponga esperanza;
donde haya tinieblas, ponga  la luz;
donde haya tristeza, ponga alegría.
¡Oh, divino Maestro!: Que no me empeñe tanto
en ser consolado como en consolar;
en ser comprendido como en comprender;
en ser amado, como en amar.
Porque dando se recibe;
olvidando se encuentra;
perdonando se es perdonado;
muriendo se resucita a la vida eterna.

Oración al Espíritu Santo
Ven, Espíritu Santo,
llena los corazones de tus fieles
y enciende en ellos el fuego de tu amor.
Envía, tu Espíritu y todo será creado.
Y renovarás la faz de la tierra.

Oh, Dios que instruiste los corazones de tus fieles
con la luz del Espíritu Santo,
haz que apreciemos
rectamente todas las cosas
según el mismo Espíritu
y gocemos siempre de su consolación.
Por Cristo, Señor Nuestro. Amén.

Comunión Espiritual
Creo, Jesús mío,
que estás real
y verdaderamente en el cielo
y en el Santísimo Sacramento del Altar.
Os amo sobre todas las cosas
y deseo vivamente recibirte
dentro de mi alma,
pero no pudiendo hacerlo
ahora sacramentalmente,
venid al menos
espiritualmente a mi corazón.
Y como si ya os hubiese recibido,
os abrazo y me uno del  todo a Ti. Señor, no permitas que jamás me aparte de Ti. Amén


El Santo Rosario




Misterios Gozosos (lunes y sábado)
1. La Anunciación
2. La visita de la Virgen María a Santa Isabel
3. El Nacimiento de Jesús en Belén
4. La presentación en el Templo
5. El Niño perdido y hallado en el Templo

Misterios Luminosos (jueves)
1. El Bautismo en el Jordán
2. Las bodas de Caná
3. El anuncio del Reino invitando a la conversión
4. La Transfiguración del Señor
5. La institución de la Eucaristía.

Misterios Dolorosos (martes y viernes)
1. La oración en el huerto de Getsemaní
2. La flagelación de Jesús
3. La Coronación de espinas
4. El camino del calvario
5. La Crucifixión y Muerte de Jesús

Misterios Gloriosos (miércoles y domingo)
1. La Resurrección
2. La Ascensión del Señor
3. La Venida del Espíritu Santo
4. La Asunción de la Virgen María
5. La Coronación de la Virgen María
                        
 Meditaciones a los Misterios del Rosario en:




 Via Crucis

Al comenzar cada Estación se reza:
Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
Porque por Tu Santa Cruz redimiste al mundo.
(Padrenuestro, Ave María , Gloria)
Al terminar la Estación decimos:
Piedad, Señor, pecamos contra Ti.

  1ª Estación: Jesús es condenado a muerte.
  2ª Estación: Jesús lleva la cruz sobre sus hombros.
  3ª Estación: Jesús cae por primera vez.
  4ª Estación: Jesús encuentra a María.
  5ª Estación: El Cireneo ayuda a Jesús a llevar la cruz.
  6ª Estación: Una mujer piadosa seca el rostro de Jesús.
  7ª Estación: Jesús cae por segunda vez.
  8ª Estación: Jesús consuela a las mujeres que lloran por El.
  9ª Estación: Jesús cae por tercera vez.
10ª Estación: Desnudan a Jesús de sus vestiduras.
11ª Estación: Clavan a Jesús en la cruz.
12ª Estación: Jesús entrega su vida por amor a nosotros.
13ª Estación: Los discípulos bajan de la cruz el cuerpo de Jesús.
14ª Estación: Entierran a Jesús en un sepulcro nuevo.

Meditaciones a las estaciones del Vía Crucis en:



Angelus

El Angel del Señor anunció a María.
Y concibió por obra del Espíritu Santo.
Avemaría...
Aquí está la Esclava del Señor.
Hágase en mí según Tu Palabra.
Avemaría...
Y el Hijo de Dios se hizo hombre
y habitó entre nosotros.
Avemaría...
Ruega por nosotros Santa Madre de Dios.
Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.

Derrama, Señor, tu Gracia en nuestras almas,
para que los quepor el anuncio del Angel,
hemos conocido la Encarnación de tu Hijo,
lleguemos por su Pasión y su Cruz,
a la Gloria de la Resurrección.
Por  Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.




Regina Coeli

Reina del Cielo, alégrate ¡Aleluya!
Por el que mereciste llevar en tu seno ¡Aleluya!

Resucitó, como lo había dicho, ¡Aleluya!
Ruega por nosotos a Dios ¡Aleluya!

Alégrate, Virgen María ¡Aleluya!
Porque resucitó verdaderamente ¡Aleluya!


Himno a Jesús Sacramentado
de Santo Tomás de Aquino

Te adoro con devoción, Dios escondido, oculto verdaderamente bajo estas apariencias.
A Ti se somete mi corazón por completo, y se rinde totalmente al contemplarte.
Al juzgar de Ti, se equivocan la vista, el tacto, el gusto; pero basta el oído para creer con firmeza;
creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios: nada es más verdadero que esta palabra de verdad.
En la Cruz se escondía sólo la Divinidad, pero aquí se esconde también la Humanidad;
creo y confieso ambas cosas, y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido.
No veo las llagas como las vió Tomás, pero confieso que eres mi Dios:
haz que yo crea más y más en Ti, que en Ti espere y que te ame.
¡Oh memorial de la muerte del Señor! Pan vivo que das vida al hombre:
concede a mi alma que de Ti viva y que siempre saboree tu dulzura.
Señor Jesús, bondadoso Pelícano, límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre,
de la que una sola gota puede liberar de todos los crímenes al mundo entero.
Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego que se cumpla lo que tanto ansío:
que al mirar tu rostro cara a cara, sea yo feliz viendo tu gloria. 
Amén.


Jaculatorias

Sagrado Corazón de Jesús, en  Vos confío.
Jesús, manso y humilde de corazón, haz mi corazón semejante al vuestro.
On, María, sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a vos.
Dulce corazón de María, sed la salvación del alma mía.
Ave María Purísima, sin pecado concebida.
Nuestra Señora del Rosario, ruega por nosotros
San José, castísimo esposo de María, ruega por nosotros.